Contexto del caso y actuación profesional

La Comisión Nacional de Disciplina Judicial resolvió un recurso de apelación relacionado con la sanción impuesta a una abogada que representaba a un cliente en un proceso laboral contra una empresa. Se evidenció que la demanda inicial fue presentada en marzo de 2023, pero fue inadmitida y posteriormente rechazada por errores en la presentación. La abogada demoró cinco meses en radicar nuevamente la demanda, lo que causó la prescripción de la acción y perjuicios al cliente. Durante este tiempo, la abogada participó como candidata en unas elecciones locales, argumento que utilizó para justificar la suspensión temporal del mandato profesional. Sin embargo, no se encontró evidencia que acreditara un acuerdo formal para la suspensión de la gestión encomendada, mientras que el cliente solicitaba insistentemente información sobre el estado del proceso, sin recibir respuesta adecuada.

Fundamentos de la sanción y consideraciones jurídicas

La Comisión concluyó que la conducta de la abogada constituyó una falta disciplinaria culposa, consistente en la falta de diligencia profesional y en la demora injustificada en las gestiones asignadas. Se destacó que la abogada tenía la opción de renunciar al mandato para evitar un posible conflicto derivado de su participación política, pero optó por postergar la continuación del proceso, relegando los intereses del cliente. Asimismo, se señaló que el cliente no negó el pago de honorarios y manifestó disposición para realizar abonos, pero la demora provocó la revocatoria del poder otorgado. La conducta de la abogada fue considerada contraria a los deberes profesionales establecidos en la Ley 1123 de 2007, específicamente en los artículos que regulan la atención...