La decisión se refiere al análisis de un recurso extraordinario de casación interpuesto contra una sentencia que confirmó la condena por abuso sexual a una menor de edad. El proceso se remonta a hechos ocurridos en 2013, cuando la víctima tenía nueve años y fue agredida por la pareja de su madre. La condena inicial impuso una pena de 108 meses de prisión y la inhabilitación para ejercer derechos y funciones públicas por igual término.

Antecedentes y argumentos de la defensa

El defensor del condenado presentó la demanda de casación alegando errores en la valoración de las pruebas por parte de los juzgadores. Entre sus principales argumentos se destacaron las supuestas contradicciones en el testimonio de la menor y la consideración indebida de testimonios de referencia para fundamentar la condena, lo cual está prohibido expresamente por la Ley 906 de 2004. También se cuestionó la ausencia de un dictamen psicológico que acreditara las afectaciones sufridas por la víctima y se señaló la posible sugestionabilidad del testimonio.

Consideraciones de la Sala de Casación Penal

La Corte recordó que el recurso de casación no corresponde a una tercera instancia ni a una nueva valoración de pruebas, sino a un control de legalidad y constitucionalidad. Se destacó que la defensa no explicó con claridad los errores que justificarían la anulación de la condena ni su relevancia jurídica en el contexto del recurso. La Sala explicó que las aparentes contradicciones en el testimonio de la menor fueron analizadas y justificadas por los juzgadores, quienes consideraron elementos como el contexto de hostigamiento previo y las amenazas para guardar silencio. Además,...