Antecedentes del caso

Un ciudadano presentó demanda de nulidad contra la inscripción de un codirector en un partido político, inscrito mediante resolución del Consejo Nacional Electoral (CNE). La demanda argumenta que la designación infringió prohibiciones establecidas en la ley sobre incompatibilidades e inhabilidades para exservidores públicos, específicamente la prohibición de participar en la gestión de intereses privados relacionados con entidades en las que se ejercieron funciones públicas durante un año después de dejar el cargo. El demandante sostiene que, habiendo culminado su periodo como registrador nacional del Estado Civil, la persona designada como codirector del partido político estaría incurso en esta incompatibilidad, ya que en su función anterior organizó y dirigió procesos electorales donde el partido tuvo participación activa. El CNE, por su parte, negó la impugnación presentada contra la designación, argumentando que las funciones del cargo público y del codirector en el partido político versan sobre asuntos diferentes, y que no existió conflicto de intereses ni violación normativa. El partido político también se opuso a la demanda, señalando que la norma citada es aplicable sólo a servidores públicos y que la entidad electoral cumplió con su deber de verificar el cumplimiento de requisitos legales y estatutarios.

Excepciones previas y competencia

El Consejo Nacional Electoral planteó excepciones previas de ineptitud de la demanda y falta de legitimación activa, las cuales fueron rechazadas por el tribunal. Se determinó que el medio de control de nulidad es procedente para este caso, pues se cuestiona un acto administrativo de contenido particular sin que se busque el restablecimiento automático de un derecho subjetivo. El despacho se declaró competente para tramitar...