Antecedentes del caso

El conflicto surge a partir de una demanda verbal para el levantamiento del velo corporativo y la desestimación de la personalidad jurídica promovida contra una sociedad en liquidación, sus accionistas y administradores. La demanda fue presentada en el Juzgado Sexto Civil del Circuito de Oralidad de Medellín, que inicialmente rehusó conocer del asunto por considerar que la competencia era de la Superintendencia de Sociedades. Por su parte, esta última también declinó competencia, argumentando que, al haberse presentado la demanda ante el juzgado, este debía continuar con el trámite. Ante la colisión negativa de competencia, el asunto fue remitido a la Corte Suprema de Justicia para su decisión.

Consideraciones de la Corte Suprema

La Corte recordó que los conflictos de competencia entre autoridades administrativas en funciones jurisdiccionales y jueces deben ser resueltos por el superior funcional común del juez desplazado. En este caso, dado que la disputa involucra a la Dirección de Jurisdicción Societaria de la Superintendencia de Sociedades y a un juzgado civil del circuito en Medellín, corresponde al Tribunal Superior de Medellín, en su condición de superior funcional, dirimir el conflicto. Además, la Corte aclaró que la Superintendencia de Sociedades, aunque tiene su sede principal en Bogotá, ejerce jurisdicción en todo el territorio nacional, por lo que sus decisiones tienen efectos en diferentes distritos judiciales. Por último, la Corte concluyó que no es competente para resolver el conflicto y ordenó remitir el expediente a la Sala Civil del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Medellín para la resolución correspondiente.

Decisión final

La Sala de Casación Civil, Agraria y Rural de la Corte Suprema de...